CUIDADO FACIAL

En pocos pasos, cómo preparar agua de rosas para hidratar la piel

El agua de rosas posee propiedades antiinflamatorias y descongestionante.

Agua de rosas.Créditos: Fuente: producción Panorama España
Escrito en ESTILO DE VIDA el

Al agua de rosas siempre se le han atribuido numerosos beneficios para la salud. Ya en la India y los países árabes se utilizaba como un remedio básico para rejuvenecer la piel, para ritos religiosos y también para comidas. Su preparación es súper sencilla y solo se necesitan pocos ingredientes.

Ingredientes:

Agua mineral.
Pétalos de rosas.
Esencia de rosas.

El primer paso para lograr el agua de rosas es hervir un litro de agua mineral en una olla. Una vez que el agua rompa hervor, agregar los pétalos de rosa naturales (también puedes usar pétalos secos). Si utilizas una flor recién cortada, utiliza los pétalos exteriores, ya que son los que poseen más propiedades al estar en contacto directo con el sol.

Rosas. Fuente: Pexels

A continuación añade unas gotas de esencia de rosas (entre 20 y 25 gotas), esto ayudará a potenciar el aroma del agua de rosas, y también le dará un tono rosado. Deja hervir la mezcla nuevamente y pásala a un recipiente para que se conserve por más tiempo. Antes de usarla, asegúrate que la preparación macere por 1 o 2 días. Si quieres un agua de rosas más intensa puedes dejar los pétalos macerar un día o dos en agua mineral y recién ahí proceder a fusionar los ingredientes al fuego.

¿Cuáles son los beneficios del agua de rosas?

El agua de rosas brinda numerosos beneficios digestivos. Si incluyes los pétalos de la rosa en las comidas, ayudarás a aliviar el estreñimiento. Puedes añadir los pétalos en ensaladas, preparar té o incluso hacer dulce de rosas. Por otro lado, los pétalos también son conocidos por sus propiedades astringentes. En la medicina natural se suele recomendar colocar un paño mojado en infusión de rosas frente a una inflamación ocular.

Rosas. Fuente: Pexels

El agua de rosas también sirve para mejorar los dolores de garganta. Solo hay que cocer el fruto con agua hirviendo, con semillas incluidas, para después colar el contenido y beber dos tazas al día. Sin embargo, el beneficio más conocido del agua de rosas es la vitalidad y la humectación que le devuelve a la piel al aplicarla.