La celulitis, también llamada piel de naranja, es un verdadero rollo estético para las mujeres. Muchas luchan a diario desde muy jóvenes para evitar esos hoyuelos en la piel. Sin embargo, no hay soluciones mágicas ni recetas milagrosas. Lo que sí hay son maneras de frenar su avance y, para eso, un cambio en la alimentación es fundamental.
Las investigaciones médicas sobre la celulitis coinciden en afirmar que, sin importar peso o edad, afecta a entre el 90 y el 98 % de las mujeres. Este dato debería aliviarte si estás en esa lucha, para no sentirte sola, todo lo contrario. Una buena combinación para reducir su aparición es combinar una rutina de ejercicios con cremas específicas.
Entonces, hay que mover el cuerpo y elegir bien qué productos cosméticos utilizar (recomendamos una consulta dermatológica previa) para combatir la celulitis. Pero hay otra clave: la alimentación. Frutas como el plátano, rico en potasio, es un gran ‘drenador’ linfático. También es bueno sumar frutos rojos, kiwi, naranja y limón, que proveen altos contenidos de vitamina C y son antioxidantes.
Por el lado de las verduras, las endivias son las abanderadas del potasio. Acelgas y puerros aportan propiedades diuréticas. En tanto, los espárragos y las alcachofas también ayudar a pelear contra la celulitis, ya que son verduras diuréticas y ayudarán a eliminar la retención de líquidos. También podemos sumar el consumo de pescado azul (dos veces por semana) y preferir el aceite de oliva.
Incorporar estos alimentos ayudará a frenar el avance de la celulitis y mejorará la apariencia de nuestra piel. Para que toda la piel del cuerpo luzca mejor, lo indicado es mantener siempre una buena hidratación. Al mismo tiempo, si estamos decididas a realizar estos cambios, también es importante dejar malo hábitos, como el consumo excesivo de alimentos grasos y ultraprocesados. Además, reducir o evitar el consumo de alcohol.