Una tarta cremosa de mascarpone que no contiene ni un gramo de harina es posible hoy en día. Esta deliciosa creación combina la riqueza del queso con la simplicidad de su preparación, lo que la convierte en la elección perfecta para aquellos que buscan una opción sin gluten o simplemente desean probar algo nuevo y exquisito.
Ingredientes
- 500 gramos de queso mascarpone
- 3 huevos
- 150 gramos de azúcar
- 1 cucharadita de esencia de vainilla
- La ralladura de un limón
- 1 pizca de sal
Instrucciones
- Precalienta el horno a 180 grados Celsius y engrasa un molde para tarta con mantequilla. Separa las claras de las yemas de huevo. Colócalas en un tazón grande y las yemas en otro. En el tazón de las yemas, agrega el azúcar y bate con un tenedor hasta obtener una mezcla suave y homogénea.
- Agrega el queso mascarpone a las yemas y mezcla bien hasta que obtengas una crema espesa y suave. Añade la esencia de vainilla y la ralladura de limón a la mezcla y revuelve para combinar los sabores. En el tazón de las claras, agrega una pizca de sal y bátelas con una batidora eléctrica hasta que se formen picos suaves.
- Con movimientos suaves y envolventes, incorpora las claras batidas a la mezcla de mascarpone. Asegúrate de que la masa sea uniforme y sin grumos. Vierte la mezcla en el molde preparado y alisa la superficie con una espátula. Hornea durante 35-40 minutos o hasta que la tarta esté dorada en la parte superior y firme al tacto.
- Una vez que la tarta esté lista, sácala del horno y déjala enfriar a temperatura ambiente. Luego, refrigérala durante al menos dos horas antes de servirla.
Esta tarta cremosa de mascarpone es una verdadera delicia sin rastro de harina. Su textura suave y el sabor delicado del queso se combinan para crear un postre que es perfecto para cualquier ocasión. Además, es una opción ideal para aquellos con restricciones dietéticas, ya que es libre de gluten.
La esencia de vainilla y la ralladura de limón aportan un toque de frescura a esta tarta, equilibrando la riqueza del queso mascarpone. Y la ausencia de harina no solo la hace apta para personas con sensibilidad al gluten, sino que también le da una textura más suave y delicada.