El tinte en las cejas se usa para modificar el color del vello facial y darle más definición y armonía a la mirada, además es un gran aliado para evitar las molestas canas. De seguro lo usas a menudo para dale continuidad a tu mirada, pero también es importante que sepas como quitarlo de manera correcta. Ahora te lo contamos en esta nota.
Estas son algunas de las técnicas que puedes realizar
Si quieres cambiar el tinte de tus cejas, lo primero que debes hacer es quitar el tinte que tienes aplicado. Para ello, existen varios remedios caseros que te pueden ayudar a lograr el tono de forma natural y sin dañar el vello y que además sea mucho más amigable para ti.
Una opción es usar una mezcla de vinagre blanco y agua tibia, que actúa como un agente decolorante. Para lograrlo debes empapar un algodón en la solución y pasarlo por las cejas, dejándolo actuar unos minutos. Luego, enjuaga con agua fría y repite el proceso hasta conseguir el tono deseado.
Otra alternativa es usar jugo de limón, que tiene propiedades aclarantes y antioxidantes. La técnica es muy sencilla, debes exprimir un limón y aplicar el jugo sobre las cejas con un algodón, evitando el contacto con los ojos. Deja que se seque al aire libre y luego lava con agua fría. Puedes hacerlo una vez al día hasta obtener el resultado esperado.
También puedes usar champú anticaspa y bicarbonato de sodio, que ayudan a eliminar los pigmentos del tinte, pero de manera más natural. El proceso que debes realizar es tan sólo mezclar una cucharada de champú con media de bicarbonato y aplicar la pasta sobre las cejas, masajeando suavemente. Deja que actúe unos 15 minutos y luego aclara con agua fría. Repite el proceso cada dos días hasta aclarar el tono.