El árbol de jade es una planta que, según el Feng Shui, tiene el poder de atraer el amor y la prosperidad a tu hogar. Se trata de una suculenta de hojas verdes y carnosas, que simbolizan el crecimiento y la abundancia. Si quieres aprovechar sus beneficios, te contamos cómo cuidar tu árbol de jade y dónde ubicarlo en tu casa.
La importancia de la luz para tu árbol de jade
El árbol de jade necesita mucha luz para desarrollarse bien, pero no le gusta el sol directo, que puede quemar sus hojas. Lo ideal es ubicarlo cerca de una ventana que reciba luz natural, pero con una cortina que filtre los rayos solares. El árbol de jade debe recibir al menos 5 horas de luz al día, pero también necesita descansar durante la noche. Si no tienes suficiente luz natural en tu hogar, puedes usar una lámpara especial para plantas, que imita la luz del sol. Debes colocarla a unos 30 cm de distancia del árbol de jade y encenderla durante unas 8 horas al día.
El riego adecuado para tu árbol de jade
La frecuencia del riego dependerá de la temperatura y la humedad del ambiente, pero por lo general se recomienda regar el árbol de jade una vez por semana en verano y cada dos o tres semanas en invierno. Es mejor usar agua tibia y dejarla reposar unas horas antes de regar, para eliminar el cloro y otros químicos.
El lugar ideal para tu árbol de jade según el Feng Shui
El Feng Shui es un arte milenario que busca armonizar la energía del hogar con la naturaleza. Según esta filosofía, el árbol de jade es una planta que atrae el amor y la prosperidad, por lo que se debe ubicar en lugares estratégicos de la casa. Uno de los mejores lugares para colocarlo es la entrada principal, ya que por ahí ingresan todas las energías al hogar. La planta actúa como un filtro que purifica las energías negativas y potencia las positivas.
Otro lugar recomendado para poner el árbol de jade es el dormitorio, especialmente si se busca mejorar la relación de pareja o atraer a un nuevo amor. Esta planta ayuda a crear un ambiente romántico y armonioso, favoreciendo la comunicación y el entendimiento. Se debe colocar cerca de la cabecera de la cama o en una mesita de noche.