Lady Di no tuvo una vida fácil desde ningún punto de vista, más allá de nacer en una familia acomodada y de convertirse en princesa de Gales, las dificultades emocionales a las que se tuvo que enfrentar desde pequeña la convirtieron en una mujer muy sufrida, quizá por eso fue capaz de sentir tanta empatía hacia las personas.
De la infancia de Lady Di no se ha hablado demasiado debido a que la relación con su madre, Frances Roche no fue sencilla. La mamá de Diana, contrajo matrimonio con Jhon Spencer en 1954. La relación de pareja no fue larga, debido a que Frances conoció a otro hombre y decidió alejarse se su marido y de sus hijas.
Lady Di quedó bajo la custodia de su abuela Lady Fermoy junto a sus hermanos y según los expertos este abandono la marcó de por vida. Si bien Frances intentó acercarse a sus hijos, la relación no mejoró en absoluto debido a las hostilidades que su presencia producía en el hogar.
De adulta y ya madre de William y Harry, Lady Di, intentó darle una nueva oportunidad a su madre y compartieron unas vacaciones, sin embargo Frances divulgó rumores de la princesa de Gales y de la familia real británica, algo que dio por terminada la relación entre ambas y que perjudicó en demasía a la princesa del pueblo.
Luego de la muerte de Lady Di, Frances Roche pasó sus últimos años realizando obras de caridad, quizá como una forma de expiar sus culpas. La madre de la princesa de Gales falleció en el año 2004 con 68 años y los entonces príncipes William y Harry, asistieron al funeral de su abuela materna.