Cualquiera podría pensar que los bolsos de la Reina Isabel II son para cumplimentar sus increíbles looks. Como toda mujer necesita portar ciertos elementos en todos los eventos a los que acude y un bolso de lujo es perfecto para tales fines y además refuerza todos sus looks con los bolsos de la emblemática marca Launer London quienes los hacen especialmente para ella. Se sabe que la reina lleva pocas cosas en su bolso como sus anteojos, pastillas de menta, pañuelos, un billete para donar cada vez que asiste a un acto religioso y una pluma estilográfica en su interior. Al igual que cualquier mujer necesita portar este tipo de cosas.
Pero la realidad es que dichos bolsos tienen una función particular y no es puntualmente la de portar cosas sino la de ayudar a la reina a comunicarse con sus guardaespaldas sobre las cosas que va sintiendo o pensando en cualquiera de los eventos multitudinarios a los que asiste.
Como evidentemente la Reina Isabel II no puede estar hablando con su seguridad real ya que debe prestar atención a las personas que la rodean en el evento, la reina ha inventado junto a su seguridad diversos códigos que comunica con los movimientos, posiciones, o ademanes que realiza con su bolso de turno.
A medida que avanzan las conversaciones con sus invitados notaremos que la Reina Isabel II irá modificando la posición de su bolso para informarse con su personal de seguridad. En el caso de que su bolso se encuentre colgado en su silla significa que está contenta con la conversación y que desea extenderla, pero si ella la coloca sobre la mesa es que ya quiere ir concluyendo el encuentro.
Pero la señal más importante de todas es si llegase a colocar su bolso en el suelo ya que está informando que por algún motivo la Reina Isabel II desea concluir inmediatamente la reunión y retirarse de aquel sitio con urgencia.