El mundial de la FIFA en Qatar ha estado marcado por las polémicas y por las manifestaciones en contra de la organización de una copa del mundo en un país que diariamente vulnera los derechos de las mujeres y de la comunidad LGTBI de varias maneras.
No solo la sociedad se ha hecho eco de las injusticias que suceden en aquel país sino que los mismos participantes incluyendo los jugadores y sus respectivas federaciones de fútbol se han pronunciado para dejar en claro la indignación que les provoca la enorme contradicción que ejerce la FIFA aliándose con Qatar.
La última prueba del descontento mundial la ha ejercido el que muchos llaman “ el superhéroe mundialista”, se trata de Mario Ferri, un hombre italiano que irrumpió a la fuerza en el campo de juego mientras se disputaba el encuentro entre Portugal y Uruguay. Aprovechando la enorme cantidad de espectadores que estarían viendo ese partido por la participación de Cristiano Ronaldo en el juego, decidió dar un claro mensaje que ya se reproduce en todo el mundo.
En sus manifestaciones se pudo ver varias causas con múltiples mensajes. Para empezar llevaba consigo la bandera de arcoíris en claro apoyo al colectivo LGTBI. Su apoyo a esta comunidad siempre ha estado presente a lo largo de su vida. A su vez, contaba con una camiseta con el logo de Superman y debajo de este la inscripción “Salven a Ucrania” en evidente descontento por la guerra que se libra en ese país contra Rusia.
No es la primera vez que este muchacho italiano se manifiesta por las causas injustas. Ya era conocido para haber irrumpido en un campo en el mundial de Brasil 2014 en el partido entre Bélgica y Estados Unidos con una camiseta con las inscripciones "Salven a los niños de las favelas" y "Ciro Vive", en homenaje a un aficionado del Nápoles fallecido poco tiempo antes.